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Frecuentemente tenemos la necesidad de usar cuchillos en el lugar de trabajo tanto como en la casa. Cortamos las cintas de las cajas de papel, abrimos contenedores y cortamos carne, cuerdas, material, etc. Sin embargo, no siempre lo hacemos con seguridad. Observe a alguien usando un cuchillo y fijase en cuantas veces esta persona corre el riesgo de ser lesionada al cortar hacia el cuerpo. Por ejemplo, cuando corta una barra de pan, es común que la persona sujeta el pan cerca del pecho y corta hacia el cuerpo. A veces cuando se corta una cuerda, doblamos la cuerda en una lazada y le insertamos el cuchillo, cortando el borde de la lazada hacia arriba. ¡Esta no es buena idea! Cuando el cuchillo traspasa la cuerda, la fuerza de la acción de cortar puede aportarlo a la cara u otras partes del cuerpo.
Un uso poco prudente, pero común de los cuchillos para cortar cajas es extender el cuchillo al lado opuesto y jalarlo hacia el cuerpo. Una regla general es “siempre corte en la dirección opuesta al cuerpo y nunca se cortará.” Otra verdad es, “un cuchillo afilado es un cuchillo más seguro.” Esto le provee mayor control de la cuchilla. Cuando se aplica mucha fuerza, la cuchilla corta más de lo previsto, a veces su piel.
La protección de las manos y brazos está disponible para ciertos oficios que requieren el uso de cuchillos. Guantes especializados protegen las manos y brazos de cortes y punciones. Los trabajadores inteligentes consistentemente llevan protección.
Lo fundamental es practicar un manejo seguro de cuchillos:
- Sólo use cuchillos afilados
- Use el cuchillo adecuado para la tarea
- Lleve guantes resistentes a cortes cuando es necesario
- Siempre corte en dirección opuesta al cuerpo.
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